- El perro babea, está nervioso
- Tiene contracciones musculares involuntarias (tiembla)
- Se defeca (no controla su cuerpo)
- Es hipersensible a los ruidos.
¿Cómo actuar?
-Tomar un puñado de sal disuelta en agua y darle con ayuda de una jeringa.
-Cuando haya vomitado, repetir la acción 2 veces mas. Así expulsará el veneno consumido.
-Luego, administrar "pastillas de carbón" (Carbón Sulfaguanidina, se vende en cualquier farmacia) disueltas en agua para evitar que el tóxico se absorba a nivel del intestino.
- Llamar inmediatamente a su veterinario o trasladarlo al más cercano, donde se le inyectará "el antídoto".
- Recoger pruebas del envenenamiento del perro.
Fuente: Post
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